En entradas anteriores, hemos llamado la atención sobre la circunstancia de que existe un tema ausente en la campaña electoral. Nos referimos al que concierne a la descentralización y las autonomías políticas. ¿Cual es la razón de la ausencia de este tema en la campaña de Capriles? Lo ignoramos, pero no por ello dejaremos de mencionar el tema que, de acuerdo al gobernador de Carabobo "es el partido de 8 de cada 10 venezolanos" (Henrique Salas Feo dixit).
En esta ocasión prestaremos atención a otra problemática: temas cuyo significado electoral lo proporciona el “marco” del adversario.
Intentemos explicar esta afirmación. Hoy en día sabemos que la gente “piensa” al interior de “marcos. Es decir, tenemos estructuras mentales arraigadas que configuran la comprensión del mundo. El relato asistencialista, por ejemplo, es un marco que ha ordenado la gran mayoría de las propuestas políticas del país. Su punto neural es la idea, profundamente arraigada en la población, que el estado debe asistirla a cambio de lealtad política y electoral. Es por ello que una oferta de corte asistencialista (misiones, viviendas, planes de empleo, etc.) tendería a ser reinterpretada por el electorado en términos de este marco discursivo que actualmente se identifica con el oficialismo.
¿Cómo se puede contrarrestar este sesgo populista identificado, repetimos, al oficialismo?
Aunque no parece sencillo, una respuesta pudiera ser que la oposición federalice la oferta electoral. Es decir, que tome los conceptos, arraigados según dijimos, en la psiquis del venezolano y la transforme en propuesta del candidato de oposición
¿Qué significa este concepto?
Sencillamente, “enmarcar” estas promesas dentro de un relato federal. Por ejemplo: las misiones, viviendas y demás propuestas asistencialistas deberían ser financiadas con los recursos que proporciona el pago del IVA en las regiones. Es decir, federalizar (o regionalizar) las propuestas. Esto tendría la virtud de rescatar su sentido asistencialista, pero en clave federal. Distanciándose, así, del discurso del oficialismo pero aprovechando el concepto de asistencialismo. Lo federal marcaría distancia con la oferta del adversario político.
En fin, creemos que modificar el lenguaje y las propuestas electorales en tono federal tendría dos grandes virtudes: una, hacerla creible, en cuanto que los estados si conocen los problemas locales; y dos, permitiría una mayor comunicación con la diversidad cultural presente en el país.
Y, lo más importante, abriría caminos a las emociones consustanciales con un liderazgo que se propone cambiar a la república, según sus más destacados voceros.
Y, lo más importante, abriría caminos a las emociones consustanciales con un liderazgo que se propone cambiar a la república, según sus más destacados voceros.
3 comentarios:
Estimados, de acuerdo con que la oferta debe ser diferente, federalista, y que actualmente es asistencialista / centralista.
Pero ese marco cultural del asistencialismo es la base del Rentismo Clientelar, y es lo que debemos transformar en Productivismo a través del desarrollo humano, basado en la educación y el conocimiento.
Ninguna concesión con el asistencialismo… Los verdaderos líderes no se limitan a los "Marcos" actuales sino que transforman las creencias e instalan los "nuevos Marcos" que le convienen al desarrollo de sus países.
Les propongo el marco del "Productivismo Federal"
“A mí no me den pescado, a mí no me enseñen a pescar. A mi enséñenme a montar una piscicultura, y me dan un préstamo, que yo lo pago”. Así es que vamos a comer pescado todos, siempre…
Es cierto. Ya vivimos experiencias parecidas a la de las misiones, mi "tarjeta la negra"; los resultados fueron desastrozos. El "marco" hay que crearlo. La MUD, ha mi juicio, tiene errada la ruta al progreso.
Señor Ladrillo, muy oportuno su comentario y el marco "Productivismo Federal". El problema, en estos momentos, es como hacerle llegar al candidato que federalice su discurso. Y lo que es más importante, que se lo tome en serio. Recordemos que federalizar significa, entre otras cosas, perder parte del poder. Por ese (y otros motivos) se llevó a juicio a Carlos Andrés Pérez. Tal parece que AD nunca le perdonó la pérdida de poder que traspasó a los estados. ¿Estará dispuesto Capriles a "federalizar" no el discurso sino el país?
Publicar un comentario